sábado, 11 de junio de 2011

LA VIDA







Que sepas amigo mío
Que estamos aquí de paso
Escapa de los fracasos
Busca siempre el buen camino.
No soy ningún adivino
Ni me paso el día buscando
Pero me quedo pensando
Que la vida que vivimos
Solo la disfrutan cuatro,
Que los demás asistimos
Y vamos colaborando
Para que a los que te digo
Nada les vaya faltando,
Ni drogas ni puterío
Ni euros para gastarlos
Ni ropa buena ni abrigos
Coches de lujo ni barcos
Chales en sitios divinos
Las vegas o Montecarlo
Donde una noche de juego
Pueden estarse jugando
Varios millones de euros
Que ellos ganan a diario
Que viven más en un día
Que vivimos en cien años.

Los recursos de la tierra
No pueden dar para tantos
Vivimos en la miseria
Por que no hay un buen reparto
Le vamos a dar la vuelta
Hay quien no come a diario
Y si digo que no come
Lo demás sobra contarlo
Muchos duermen en la calle
Se visten con cuatro trapos
Nunca quitaron el hambre
Si piden les dan de palos
Nunca tuvieron un coche
No saben lo que es un barco
Ni saben de ese derroche
De las vegas, Montecarlo
No saben que por la noche
Existe ese despilfarro
No saben que ellos no comen
Por que otros no se ven artos
Ni que son la mayoría
Para poder explotarlo
Los otros en minoría
Hunden a la mayoría
Y estamos bajo su mando.

Esto no viene de ahora
Esto nos bien de antaño
Que el que repartía más hostias
Era el que tenía más mando,
Era el que mejor comía
Aunque otro fuese a cazarlo
Acuérdese usted de Atila
En la época de los Romanos
A partir de aquellos días
Nos fuimos civilizando
Luego era el que más sabia
Y esto muy bien lo explotaron
El Clero y las Abadías.
Jesuitas y Franciscanos.
De toda la vida unos pocos
A los demás explotaron
Se forman grandes fortunas
Los demás hambre y harapos,
Van destacando familias
Sus miembros cogen el mando
Van pagando a policías
Por si acaso le atacamos
Nos van dejando la paja
Ellos se llevan el grano
Y si protestan te rajan.

Sigue pasando lo mismo
Para nada, ha habido un cambio
Cada día mas egoísmo
Y cada día mas descaro
Hoy lo llaman el capital
Ellos se han organizado
Y tenemos que tragar
Sino te muelen a palos
Van dándonos libertad
Cuando todos protestamos
Cuando no vas ha currar
Por orden del sindicato
Pero estos luego se venden
Traicionando a los más bajos
Y otra vez a comulgar
Dios no nos quiso ayudar
No se produjo el milagro
Y nos vuelven ha explotar
Nos quedamos cabizbajos
Con dinero pagaran
Al que le hace ese trabajo.
Hablo del gran capital
Son los que tienen el mando
Comparados con los demás
Ellos no son más de cuatro.
Ángel Arroyo

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